La decoración de las cocinas es una tarea en la que tenemos que tener en cuenta diversas variables. Entre ellas, el espacio del que disponemos y el resto del estilo de la vivienda. Para conseguir que tu cocina tenga un diseño práctico y moderno, puedes valorar los siguientes consejos.
Cocinas integrales: aprovechando el espacio
Una de las modas actuales más buscadas en la cocina es la del diseño integral. Este tipo de cocinas se caracteriza por la optimización del espacio y prima, por encima de todo, el sentido práctico que tiene esta clase de habitaciones. Has de seleccionar muebles de cocina multiusos y que se integren a la perfección con el resto de los elementos de la estancia, para evitar los espacios vacíos.
En las cocinas integrales, tendremos que prestar especial atención al almacenamiento. Los armarios de cocina, en la parte superior de la estancia, son unas de las mejores alternativas para ocupar una cocina pequeña y con escaso espacio para guardar alimentos y menaje. Hay otras formas de aprovechar la altura de la cocina. Las cajoneras colgantes, los ganchos y los estantes son otros elementos que te ayudarán a poner orden y disponer al alcance de la mano todos los accesorios necesarios para cocinar.
Los colores de las cocinas modernas
Una vez has conseguido diseñar la disposición de los muebles según las características del espacio del que dispones, es el momento de escoger los materiales y la paleta de colores de los muebles de nuestra cocina moderna.
Para conseguir un acabado elegante y de buen gusto, es muy importante que, primero, limites la lista de materiales hasta tres opciones distintas para combinar entre sí. Los acabados uniformes son los preferidos del diseño de interiores actual y es fundamental que no satures tu cocina con elementos de origen demasiado distinto. Los toques en madera dan una impresión hogareña y casi rústica y son unas buenas opciones, si quieres una cocina con personalidad. Los metales son ideales para las cocinas pequeñas, ya que reflejan la luz y darán una mayor sensación de amplitud.
En cuanto a los colores, el estilo escandinavo sigue siendo el preferido para conseguir una cocina sofisticada y con mucha clase. Así, la paleta de colores tiene que componerse, preferentemente, de tonos neutros, tales como el negro, el blanco, los marrones y los grises. Las cocinas que priman los tonos blancos serán mucho más luminosas, pero, si la luz no es una preocupación para ti, los muebles para cocina negros darán el toque de modernidad que buscas.
Los puntos de color son bienvenidos, especialmente, si se trata de colores lisos, como el rojo, el amarillo o las distintas tonalidades de azul. Usa estos elementos con precaución, no abuses del colorido y selecciona siempre muebles clave para poner el acento en tu cocina.